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Cada semana 1 joven muere o resulta herido grave en accidente de tráfico en Asturias

miércoles 24 noviembre, 2010

Movilidad y medio ambiente | Seguridad vial

El RACC alerta de la importancia de los accidentes de tráfico en el colectivo de los conductores menores de 29 años

Cada semana 1 joven muere o resulta herido grave en accidente de tráfico en Asturias

  • La educación y formación vial son una pieza clave para un cambio de actitudes entorno a la conducción 
  • Se estima que aún hay 27.000 automovilistas asturianos que no usan el cinturón de seguridad

El RACC, entidad líder en el ámbito de la movilidad en España con 1.000.000 socios, siguiendo con la línea de fomentar una movilidad segura y sostenible, y de velar por la defensa de los usuarios, analiza la accidentalidad de los jóvenes asturianos en los últimos años, como evolución del estudio del RACC “Jóvenes y Conducción. Un derecho y una responsabilidad” que puso de manifiesto los principales problemas de la accidentalidad en carretera de los jóvenes en España, y proponía una serie de medidas para mejorarla.

El informe presentado hoy cubre el periodo 2000-2009, lo que permite tener una visión a largo plazo sobre la evolución de la siniestralidad vial de los jóvenes en el Principado de Asturias. Si bien es cierto que en los últimos años se ha producido, en general, en el conjunto de España y en el Principado de Asturias, una mejora sustancial de la siniestralidad vial, en lo referente a la accidentalidad de los jóvenes existe un margen de mejora significativa que hay que explorar.

Toda una generación en jaque
En el año 2009 murieron en el Principado de Asturias 10 jóvenes en accidente de tráfico (víctimas de accidentes en ciudad y carretera computados a 24 horas). Además 66 resultaron heridos graves y 836 heridos leves. En años anteriores, estas cifras fueron todavía más elevadas. Entre los años 2000 y 2008, por ejemplo la media anual de jóvenes muertos en carretera fue de 27, la de heridos graves de 178 (más del doble), y la de heridos leves de 1.338. Durante esos años los jóvenes representaron cerca del 30% del total de fallecidos en accidente de tráfico en Asturias y el 37,6% del total de heridos graves y leves.

Los accidentes de tráfico son la primera causa individual de fallecimiento entre los jóvenes de 20 a 29 años, con un 25,5% del total de muertes. En el tramo de los 20 a 24 años ese porcentaje fue del 30%. Cabe señalar que no hubo ningún fallecido en accidentes de tráfico el pasado año en el tramo comprendido entre los 15 y los 19 años. En general, la proporción de muertos por accidente de tráfico sobre el total de fallecimientos es más elevado en los varones que en las mujeres.

Tasa de riesgo
La tasa de riesgo (que mide el número de muertos en accidente de tráfico por cada 100.000 habitantes), ha caído de forma significativa el último año respecto al periodo 2000-2008. Así, la tasa de riesgo de este colectivo ha pasado de una media de 13,7 en el periodo 2000-2008 a 5,9 en el año 2009, mientras que la del conjunto de la población, que ha evolucionando de 9,0 a 4,7 durante esos años, es menor.

Topología de accidentes
De los 10 jóvenes muertos en accidente de tráfico en Asturias en el año 2009, 7 iban en turismo, 1 en motocicleta, 1 en ciclomotor y 1  en otros medios de transporte. Como se observa en el cuadro 3, a pesar de que el número de jóvenes muertos que viajaban en coche se ha reducido en 12 víctimas respecto a la media de los años anteriores, el porcentaje de  víctimas mortales pertenecientes a este colectivo se ha incrementado en términos porcentuales respecto al total de fallecidos de la población asturiana.

Infracciones
De las infracciones analizadas, se observa que las distracciones y, especialmente el exceso de velocidad, están principalmente relacionadas con los accidentes de los jóvenes.

Resulta así especialmente significativo que durante el periodo 2000 – 2008, más del 50% de las infracciones relacionadas con la velocidad implicasen a conductores jóvenes. Es significativo también, como se observa en el cuadro 4, que dicho tipo de infracción ha experimentado una mayor reducción en términos porcentuales que otros tipos de infracciones.

Uso de los accesorios de seguridad
El uso de los accesorios de seguridad por parte de jóvenes y del conjunto de conductores ha tendido a aumentar entre los años 2000-2009. Así, el uso del cinturón de seguridad se situó en niveles del 95 % en el año 2009, 7 puntos por encima del promedio registrado en años anteriores.

Una vida no tiene precio
Aunque evaluar el coste de los accidentes de tráfico es una tarea en cierto modo baldía ya que ni el dolor, ni por supuesto la muerte tienen un precio, las lesiones derivadas de un accidente de tráfico tienen una consecuencias sobre la vida de las víctimas que, aunque sólo sea parcialmente, pueden ser reparadas o paliadas mediante las aplicaciones de recursos humanos o materiales que, por su naturaleza, sí pueden ser evaluados con alguna exactitud.
Para la estimación de estos costes se han tenido en cuenta 4 grandes categorías: los costes de servicios de emergencias. Básicamente policía, ambulancias, bomberos y asistencia en carretera; los costes sanitarios, con especial mención de los costes asociados a las secuelas de grandes discapacitados; los costes atribuibles a pérdida de capacidad productiva ya sea por muerte o por una lesión con efectos de incapacidad y los costes materiales derivados de la reparación de la propiedad dañada (vehículos u otro tipo de propiedad).

Como se observa en el cuadro anterior, el coste total de los accidentes de tráfico en Asturias en el año 2009 se estima en 166.978.938 euros. De estos, 56.402.818 corresponden al coste de los accidentes de tráfico de los jóvenes. Esto significa que el peso de los jóvenes en el coste total de los accidentes de tráfico en Asturias es prácticamente del 34%.

Asturias versus España
Entre los años 2000 y 2009 la mortalidad por accidente de tráfico en carretera cayó un 53,6 % en el conjunto de España y un 36,3% en Asturias. El número de jóvenes muertos en las carreteras descendió un 64,6% en el conjunto de España y un 54,5% en el Principado.

Se observa, por tanto, que a nivel agregado Asturias ha tenido entre 2000-2009 un comportamiento peor que el del conjunto de España. En términos de tasas de riesgo, el Principado de Asturias partía de una situación mejor que la del conjunto de España, y mantiene una situación favorable si comparamos a la comunidad con el resto del país. Como muestra el cuadro adjunto en el año 2009 la tasa de riesgo total era 1 punto inferior en Asturias respecto al conjunto de España (4,7 muertos por 100.000 habitantes versus 5,7 muertos por 100.000 habitantes); en el caso de los jóvenes esa diferencia es también de 1 punto (5,9  muertos por 100.000 habitantes versus 6,9 muertos por 100.000 habitantes).

Conclusiones
1- Hacer aflorar el problema
El primer paso, absolutamente imprescindible, es hacer aflorar el problema de los jóvenes y la seguridad vial en Asturias. Todos los agentes implicados deben conocer la magnitud del problema y actuar en consecuencia. Para ello es imprescindible disponer de información precisa sobre las víctimas de los accidentes de tráfico.

2- Cambiar actitudes:
La actitud es una de las principales causas que provocan los accidentes de tráfico de los jóvenes, junto con la aptitud.
Para propiciar este cambio de actitudes habría que aplicar las siguientes medidas:

– Campañas de información, dirigidas específicamente a los jóvenes y focalizadas en los principales problemas de accidentalidad de la Asturias, habría que incidir en el respeto a los límites de velocidad, ya que cerca del 40% de las infracciones cometidas por los jóvenes asturianos son excesos de velocidad.

– Formación-educación: La formación de un conductor no puede limitarse, ni concentrarse, en el momento en que obtiene su permiso se conducir. La educación y formación vial debe iniciarse en la infancia y continuar a lo largo de la vida de la persona, debe ser continua centrándose en contenidos de movilidad y seguridad vial. La educación en seguridad vial en la etapa escolar es, así, fundamental.

– Conductor alternativo: El conductor alternativo garantiza una movilidad con mucho menos riesgo. Esta iniciativa refleja una actitud de responsabilidad y de autorregulación por parte del grupo en el que se personaliza. La participación de las administraciones locales del Principado de Asturias, unidas a las autonómicas, es fundamental para promover esta figura a través de campañas de educación vial.

– La conducción acompañada: Esta práctica se está realizando en países europeos como Reino Unido, Suecia o Francia, y se debería estudiar su introducción en España.

– Reforzar pruebas obtención permiso conducir: En la parte teórica habría que reforzar los contenidos relativos a seguridad vial y sobre los riesgos de los jóvenes en la conducción.

El RACC, un millón de socios
El RACC, con un millón de socios, es el mayor automóvil club de España, realiza más de 1.300.000 servicios al año de asistencia mecánica, personal y médica urgente y posee una red de 235 puntos de atención en toda España. Como entidad al servicio de la sociedad, impulsa la movilidad sostenible, la seguridad viaria y el medio ambiente y promueve el deporte del motor con la organización de tres pruebas para los mundiales: F1, Motociclismo y Rallies, y el apoyo constante al deporte base.